No es posible resolver los problemas de hoy con las soluciones de ayer
Roger Von Oech
Es probable que si alguien nos pide imaginar un robot con inteligencia artificial, nos imaginemos un robot humanoide de los que protagonizan una película futurista de ciencia ficción. Y es efectivamente una realidad que los programas de inteligencia artificial están inspirados en la más compleja y perfecta maquinaria que existe en la naturaleza: la fisiología humana. Las redes neuronales son un gran ejemplo de esta aspiración, pero.. ¿hasta dónde puede llegar esta imitación de nuestra propia naturaleza?